LOS SUCESORES DE PEDRO MARTINEZ

En la primera noche de la temporada de béisbol, en una noche espectacular en Fenway Park, Pedro Martínez tiró el primer lanzamiento ceremonial. Un par de pasos más allá, Curt Schilling, en traje y corbata, recién terminaba una intervención televisiva. Schilling no lanzará nunca más. Pedro quiere lanzar este año. Pero comenzar la temporada sin ellos, y sin Randy Johnson, Greg Maddux, Tom Glavine, John Smoltz, Roger Clemens o Mike Mussina, es un poco triste y un poco …extraño. 

Por primera vez en 15 años, ha comenzado una temporada sin un solo lanzador abridor que podamos señalar y decir, sin duda alguna, "Ese tipo ya es una leyenda". Por primera vez en 10 años, ha comenzado una temporada sin un lanzador activo con al menos 260 victorias. Jamie Moyer inicia el año con la mayor cantidad de victorias (258). Tim Wakefield abrió con más victorias entre los lanzadores derechos, con 189. Dios los bendiga por lo que ambos han hecho -- ellos son un milagro por luz propia -- pero ninguno de los dos está al nivel del Salón de la Fama. 

Por ahora, todos los abridores de Salón de la Fama se fueron. "Claro que no, yo no los voy a extrañar", dijo el campocorto de los Filis Jimmy Rollins con una sonrisa sobre los grandes lanzadores que dejaron el deporte en los últimos años. "¿Estás loco? Pero fue divertido enfrentarlos, llegar a la caja de bateo y decir, 'Rayos, estoy enfrentando a una leyenda". "Yo no voy a extrañar a Randy", dijo el primera base de los Nacionales Adam Dunn, con una sonrisa. "Ni un poquito".  Del 2008 a 2010, cuatro ganadores de 300 partidos se han retirado, oficialmente o no: Clemens, Maddux, Johnson y Glavine. Sólo ha habido un periodo similar de tres años en la historia moderna con cuatro ganadores de 300 partidos retirados: de 1987 a 1989, con Tom Seaver, Steve Carlton, Don Sutton y Phil Niekro. Pero a medida que se retiraban, ya había surgido un nuevo grupo: Clemens, Maddux, Glavine, Johnson y Martínez, todos con credenciales incuestionables para el Salón de la Fama, y Smoltz, Schilling y Mussina, quienes cuentan con buenos argumentos. Pero ahora, a menos que Smoltz o Martínez reciban una oferta para lanzar este año, ocho lanzadores con credenciales de Cy Young se marcharán del escenario en un periodo de tres años. 

Pero similarmente a la década de 1980, hay una nueva camada de lanzadores en camino. El año pasado casualmente fue el pase de balón de una vieja generación a una ola de lanzadores en alzada cuando Johnson culminó su carrera, y Tim Lincecum y Zack Greinke ganaron los premios Cy Young con 31 victorias combinadas, tantas como registró Denny McLain por sí sólo en 1968. Greinke y Lincecum no representen exactamente el tipo ganador de Cy Young en términos de tamaño o cantidad de victorias, pero ellos son dos de los líderes dinámicos del nuevo conjunto, hombres con armas mortales, muchos ponches y baja efectividad. "Ellos están creciendo de la misma manera que las leyendas crecían antes", dijo Rollins. "Esto ocurre en ciclos. Ahora, estoy seguro que estamos confrontando a futuros miembros del Salón de la Fama". Greinke y Lincecum, quien ya tiene dos Cy Young a la edad de 25 años, están en el gruido de lanzadores elite en potencia menores de 26 años, que además incluye a Josh Johnson, Tommy Hanson, Matt Cain, Ubaldo Jiménez, Clayton Kershaw, David Price, Jon Lester, Rick Porcello y Félix Hernández. Detrás de ellos hay dos de las sensaciones de primavera, Stephen Strasburg de los Nacionales y el cubano Aroldis Chapman de los Rojos. 

"Yo me imagino que la manera en que van algunos lanzadores jóvenes ahora es la manera en que Maddux y Glavine comenzaron", dijo Dunn. "Un tipo como Lincecum, tú escuchas sobre él cuando llega a Triple A, luego hay silencio y de repente, está como lanzador dominante en las mayores". ¿Pero podrá alguno de ellos llegar a ser tan bueno como, digamos, Clemens, Maddux, Johnson y Martínez? Bajo cualquier métrica estadística, están entre los mejores 20 lanzadores de todos los tiempos: Clemens, Maddux y Johnson están entre los primeros 10-12 en la historia. Clemens ganó siete premios Cy Young. Maddux tal vez ha sido el pitcher de mejor control de todos los tiempos: Pasó tres años sin un "passed ball" con él tirando en el montículo. Johnson marcó seis temporadas con 300 ponches, incluyendo cinco en fila. Las temporadas de 1999 y 2000 de Martínez podrían ser las mejores temporadas consecutivas de cualquier lanzador. 

De la manera en que se juega ahora el béisbol, ¿podremos ver a alguien tan bueno como esos cuatro?

"Estos tipos de ahora tienen mucho talento, pero nunca sabremos cuán buenos pueden ser", dijo el legendario Jim Palmer, quien completó 211 partidos en su carrera, con 25 juegos completos en 1975; el año pasado, los Dodgers fueron líderes en la Liga Nacional en efectividad y registraron un solo juego completo para un abridor. 

"Ellos nunca sabrán lo que es sacar a alguien tres, cuatro o cinco veces en un partido", dijo Palmer. "Eso es lo que pone a prueba tu mente, tu corazón y tu físico. El juego ha evolucionado. Es un juego distinto ahora. A los lanzadores se le pide que trabajen 7.1 entradas, no nueve. Nosotros vamos a tener que cambiar el criterio para entrar al Salón de la Fama. Nosotros vamos a tener que cambiar el criterio de lo que es un lanzador que tú quieres ver jugar". Hay abridores activos que se acercan a entrar al debate de una posible vinculación al Salón de la Fama. Andy Pettitte, de 37 años, cuenta con 229 victorias. Johan Santana, de 31 años, tiene 123 triunfos, y dos premios Cy Young. Roy Halladay, de 32 años, tiene 148 victorias, y un futuro brillante en Filadelfia. CC Sabathia es la mejor apuesta. Su récord es de 136-81, y solo tiene 29 años. Muy probablemente, ninguno de ellos llegue a 300 victorias. 

Pettitte fue el líder de la década anterior con 148 triunfos, la menor cantidad para un líder de década. (Walter Johnson tuvo 265 juegos ganados de 1910 a 1919). Con rotaciones de cinco lanzadores y cuentas de lanzamientos y relevistas de sobra ganando millones de dólares, será difícil hallar un lanzador con suficientes entradas en su carrera, o con 300 victorias. Santana ha realizado 235 aperturas en su carrera, y ha completado ocho. Tal vez sí necesitaremos ajustar nuestra forma de pensar, cambiar el criterio. Tal vez en cinco años, nosotros miraremos algunos de estos tipos y diremos, "Este es una leyenda ahora mismo". Pero también es posible que hayamos visto el último de los grandes lanzadores.

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