rllr en pelota
BASEBALL CITY, Boca Chica (El Caribe). Hacer transiciones en el béisbol profesional no es tarea fácil. En la mayoría de los casos, estos peloteros, después de pasar por un largo proceso como jugadores ofensivos, ven un renacer en sus carreras. Y lo hacen en otras facetas del juego. Tales son los casos de Jerry Gil (Leones del Escogido) y Yordanis Ramírez (Tigres del Licey). Antes eran paracorto y jardinero y hoy son lanzadores, cambio al que poco a poco han ido adaptándose y hasta logros ya han acumulado. “Gracias le doy a Dios por darme la oportunidad y la habilidad de que pueda hacerlo de las dos formas (lanzar y jugar en el siore). Me está yendo muy bien y a la vez sacándole el mejor de los provechos a esta nueva faceta en mi carrera”, expuso Gil. Manifestó que la transición de paracorto a lanzador se inició luego de una operación Tommy John realizada en 2007, situación que lo llevó a perderse la temporada completa con los Rojos de Cincinnati en las Menores.
“En 2008 regresé. Jugué en Triple A, pero como había perdido un año y estaba en baja con el madero, fue cuando llegó el momento de lanzarme como pitcher. Se lo consulté al mánager, porque quería tratar algo diferente. Sé que tengo la habilidad para lanzar. Él se asombró me preguntó de si estaba seguro de lo que le decía. Habló con los ejecutivos del equipo y me probaron”, expuso Gil. Recuerda que en su primera salida le colocaron un radar para observar la velocidad en sus lanzamientos, punto que cautivó a los miembros de Cincinnati. “La tiraba a 90 y 95 millas por hora. Eso lo sorprendió a ellos. Lo primero que hicieron fue enviarme a Rockie League a tomar mecánica, así como tratar los ejercicios. Gracias a Dios que me he sentido muy bien con ese cambio”, indicó el ahora joven lanzador. En el caso de Ramírez, la situación es diferente a la de Gil, debido a que antes de realizar el cambio, estaba en los jardines.
“Sé que es difícil pero he estado trabajando mucho, mucho más que cuando era jardinero. Le he puesto más corazón al juego y ahora tengo algo que no tenía cuando estaba en el jardín central, me refiero a un extra, un mayor esfuerzo y respeto a mi cuerpo, a las personas que me rodean”, expresó Ramírez.
Sostiene que ahora tiene más conciencia de lo que debe de hacer, mediante las indicaciones que los coachs les den.
LICEY.COM
No hay comentarios:
Publicar un comentario