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Los Medias Rojas empezaron con 0-6. Luego tuvieron marca de 2-10 y parecía para tal vez la temporada ya estaba perdida. "Tuvimos que lidiar con muchas cosas", dijo el manager de Boston, Terry Francona, acerca de esos momentos al principio de abril, cuando jugaron su primer partido en casa con récord tan negativo. "Pensé que me presentarían en la raya de la primera base y me pregunté si los fans nos iban a pegar un tiro." Pero los fanáticos aguantaron el fuego, y los Medias Rojas encontraron el suyo. Lo que han hecho los Patirrojos desde entonces no es necesariamente increíble, sino lo que uno esperaría de uno de los equipos más talentosos de Grandes Ligas.
Los Medias Rojas se llevaron dos de tres partidos ante un equipo de los Indios, en Cleveland, que llegó a dicha serie con el mejor récord de la Gran Carpa y una de las mejores marcas como local. Y si Daniel Bark no hubiese perdido una ventaja en el octavo inning en el primer encuentro, Boston hubiera barrido. Josh Beckett se encargó del segundo partido, y luego de los Medias Rojas apabullaron a la Tribu en el tercer choque. Y después de eso, el equipo de Nueva Inglaterra llegó a Detroit dando batazos por todo el Comerica Park, para empatar a los Yankees en el primer lugar. Boston lleva el mejor récord del mes de mayo con 17-7, y ahora todos esos pronósticos de un anillo de campeón para Boston este año han recobrado credibilidad.
A partir del 7 de abril, estuvo de moda y fue hasta divertido señalar que apenas dos equipos de la historia-los Piratas de 1974 y los Rojos de 1995-habían empezado una campaña con 0-6 y luego habían llegado a postemporada. Y en lo que ha sido un Este de la Americana bien competitiva, podría darse ese mismo caso con dos equipos de dicha división, Medias Rojas y Rays. Ambos se han recuperado de una difícil primera semana de la temporada. Tampa Bay lo ha hecho a base de pitcheo, mientras que Boston ha subido en las posiciones mayormente con trueno ofensivo. Claro está que Beckett, Clay Buchholz y Jon Lester han lanzado como esperaban los Medias Rojas, sobre todo durante el último mes. Pero con Daisuke Matsuzaka y John Lackey fuera de acción y antes de eso con pésimas aperturas, los Medias Rojas han permitido más de cuatro carreras por juego y están entre los peores conjuntos de la Americana en ese sentido.
Las interrogantes en el pitcheo hacen más impresionante la buena racha de los Patirrojos, en cuanto al ataque ofensivo se refiere. Mientras una adición al lineup-Carl Crawford, ha sido mayormente relegado a la parte baja de la alineación, el mexicano Adrián González ha rendido hasta más de lo que todos esperaban. Llegó al jueves con promedio de .340, nueve jonrones, OPS (slugging más porcentaje de embasarse) de .951, 16 dobles y 43 empujadas. "No esperaba un período de ajuste a la Liga Americana", dijo González. "Mi rutina no se basa en una liga, sino un lanzador individual." Antes de que González llegara a Boston, Francona estaba consciente de la ética de trabajo del mexicano y su habilidad de arreglar cualquier defecto en su swing (González bateaba .263 con OPS de .732 después de 20 juegos del 2011...desde entonces lleva promedio de .393 con OPS de 1.116 en 28 encuentros.). Pero ahora ver es creer.
"Es bueno verlo en persona", expresó el piloto. "Obviamente, cuando haces una transacción de esa magnitud, tienes bastante buena idea de lo que puede hacer el jugador. Pero cuando ves un buen bateador en buena racha, es divertido verlo. Él hace muchas cosas en el plato que te hacen pensar que está encendido. Hace demasiadas cosas para encontrar la manera de conseguir los hits." Y por supuesto, González goza de más apoyo en el lineup de Boston que el de San Diego. Por otra parte, Jacoby Ellsbury se ha recuperado de los dolores en las costillas que sufrió en el 2010, y está poniéndoles la mesa a los bateadores de poder. Kevin Youkilis se ha repuesto luego de un lento comienzo y el dominicano David Ortiz evitó los baches de abril que lo afectaron tanto en el 2009 como el año pasado. Se ve revitalizado en un año de contrato.
En el campo corto, Jed Lowrie se ha adueñado de la posición, en lugar del venezolano Marco Scutaro, y ahora es uno de los torpederos más productivos de Grandes Ligas. Los puntos más débiles de la alineación han sido Dustin Pedroia, J.D. Drew y hasta hace unos días Crawford, sobre todo tomando en cuenta la magnitud de su contrato. Pero la nueva adquisición ha explotado ahora dando batazos por doquier ante Cleveland y Detroit. A la defensa, la receptoría, con Jarrod Saltalamacchia, fue un problema al principio. Pero Jason Varitek se convirtió en cátcher personal de Beckett, con grandes resultados, a la vez que el resto del cuerpo monticular se ha ido acostumbrando a "Salty". Al fin y al cabo, el pánico con los malos resultados al principio realmente no tuvo ningún fundamento.
"Creo que las cosas se han calmado un poco", dijo Francona.
Es cierto que a Boston podría caerle bien otro pitcher antes de la fecha límite del 31 de julio para hacer cambios. Pero en este equipo hay talento suficiente para que sigan arrasando en la Liga Americana. Es que necesitábamos ver las pruebas después del 7 de abril.
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