PORT ST. LUCIE, Florida Mientras José Reyes corría de la raya del jardín izquierdo a la cueva del lado de la tercera base, parecía faltarle el aire. Respiró profundo y lentamente llegó a su casillero, donde el encargado de relaciones públicas de los Mets, Jay Horowitz, lo protegió un poco de los tantos reporteros en el clubhouse.
"Deja que respire", dijo Horowitz. Después de una práctica de 75 minutos en las instalaciones de los Mets, el dominicano dijo que aún le faltaba para ponerse en forma. "Me siento mejor de lo esperado", dijo Reyes, quien no quiso pronosticar cuándo estaría listo para jugar en un partido. Los Mets no han dicho nada público al respecto, pero una persona allegada al club afirmó que es difícil que el torpedero esté en el lineup para el Día Inaugural.
"Hay que tomarlo día por día", dijo Reyes al preguntársele cuándo podría jugar. "Me alistaré lo antes posible."
Reyes hizo estiramientos, ejercicios de agilidad y corrió un poco. Fildeó tres docenas de rodados-cuatro de sus tiros picaron antes de llegar a la primera-y tomó 20 swings en la jaula de bateo. Su último swing produjo una línea al jardín derecho, lo que seguramente hubiese sido un triple para el quisqueyano. Fue mucho pedirle a un pelotero que se había pasado la mayor parte de las últimas tres semanas en su casa en Long Island. Reyes dijo que vio muchas películas, y poco más de otra cosa." Un poco de estiramiento", dijo Reyes. "No quise descontrolarme." Los niveles elevados en la tiroides que causaron que Reyes se perdiera gran parte de los entrenamientos no serán afectados con las nuevas actividades de Reyes. El manager de los Mets, Jerry Manuel, dijo que el caso del dominicano es único.
"No sé de otro jugador que haya tenido que suspender toda actividad así-sin correr ni hacer ejercicios", dijo Manuel. "Entonces, estamos tratando de ver cómo procedemos." Los Mets no han permitido que su staff médico ni de entrenamiento físico revele a los medios el programa que hará Reyes, quien de su parte dijo no saber de programa alguno diseñado para él. "Sólo hago lo que me dicen", expresó el paracorto. Entre las cosas que se le ha dicho que no haga es comer mariscos, lo cual pudo haber sido la causa de los niveles disparados en la tiroides. Los mariscos y la comida china han sido prohibidos en la dieta del pelotero, quien no sabe si esas restricciones serán levantadas en algún momento. Por ahora Reyes se someterá a análisis cada semana.
"Lo que he pasado fue algo difícil para mí", dijo Reyes. "El año pasado, este año. Hace casi un año que no juego en un partido de verdad. Ahora simplemente quiero jugar y ayudar a ganar a este equipo. Vamos a ver qué pasa."
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