SURPRISE, Arizona El derecho dominicano Neftalí Féliz viene de lanzar en una situación de salvamento en el partido entre los Rangers y los Rockies, y enseñó el brazo y el material que lo hicieron un prospecto tan cotizado. Ponchó con facilidad a los tres bateadores que enfrentó en la victoria por 7-6 de Texas sobre Colorado en la Liga del Cactus. Ocho de sus pitcheos fueron medidos en 100 millas por hora o más, y cuatro fueron de 101. Al final del 2009, los Rangers no vieron eso, ya que en el último mes de la temporada el quisqueyano estuvo tirando a 94-95 millas por hora.
"Definitivamente, se siente bien", dijo Féliz. "El año pasado, pasando por todo, subiendo desde liga menor, todo empezó a impactarme. Creo que todo el trabajo que hice rindió sus frutos. Me sentí muy bien."
Féliz también ha asimilado una lección del coach de pitcheo de los Rangers, Mike Maddux, y del manager Ron Washington. Cuando salía como abridor, querían que pitchara. Como relevista de una sola entrada, quieren que tire fuego. Féliz hizo eso mismo el lunes. "Es lo que queríamos ver", dijo Washington. "Suelta y tira en la zona de strike. A veces sale y trata de complacer a todos. Simplemente queremos que lo deje todo en el terreno." Féliz llegó a los entrenamientos con la esperanza de ser abridor, pero empezará el 2010 de regreso en el bullpen para ser preparador del cerrador. Podría ser el principal preparador si sigue tirando como ahora. "Simplemente quiero poner lo mejor de mí en el rol que me pongan", dijo el oriundo de Azua.
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