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Vladimir Guerrero arribó hoy a las instalaciones de pretemporada de los Orioles de Baltimore, se cambió de ropa y se reunió con el médico del equipo para someterse a su examen.
Como es la norma para el toletero dominicano, lo hizo en silencio. Guerrero, de 36 años, llegó a un acuerdo el 4 de febrero para firmar un contrato por un año y $8 millones, pero problemas de itinerario impidieron que se sometiera antes al examen. El plan provisional es que los Orioles anuncian oficialmente la contratación y lo presenten el viernes.
"Es tremendo", comentó el relevista Michael González sobre el fichaje de Guerrero. "Siempre ha sido una potencia en el plato. Y no importa su edad, todavía puede batear. Y ni siquiera puedes lanzar detrás de su cabeza o a sus tobillos, porque no sabes lo que puede hacer con ese pitcheo".
Guerrero tiene promedio de .320 y 436 jonrones en 15 temporadas en las mayores, pero pocos equipos estaban interesados en ficharlo este invierno. Los Orioles inicialmente no querían contratar un bateador designado, pero el dominicano prácticamente les cayó del cielo. "Es un bateador profesional", indicó el relevista Clay Rapada, compañero de Guerrero el año pasado en Texas. "Ha estado en el corazón de muchas buenas alineación y creo que ayudará mucho a este equipo. No habla mucho. Lo veo como una tormenta silenciosa, lo ves, pero no lo escuchas".
Eso quedó claro hoy, cuando Guerrero —como es su costumbre— rehusó hablar con la prensa. Guerrero es recordado en Baltimore por conectar un sencillo en un lanzamiento de Chris Tillman que rebotó frente al plato. Guerrero bateará cuarto como designado en la reforzada alineación de los Orioles, que también incluye al antesalista Mark Reynolds, al inicialista Derrek Lee y al torpedero J.J. Hardy.
"Con su historial, es seguro que será el cuarto bate. Creo eso despeja muchas dudas y facilita todo", comentó el jardinero central Adam Jones.
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