rllr en pelota
Robinson Canó puede decir que tiene un buen sentido de la historia. A lo mejor sus mejores notas como estudiante fueron en esa asignatura. Lo que su bate proyecta este año es para quedar registrado en la categoría de histórico. Arquitecto a estas alturas de una temporada de elevada calidad, el intermedista de los Yankees de Nueva York se encamina hacia un terreno que ningún dominicanos de su posición ha recorrido en las Mayores. Canó tiene oportunidad de convertirse en el primer criollo que accionando la mayor parte de sus juegos en la intermedia compila 200 imparables por segunda ocasión en una campaña.
Robinson es uno de cuatro dominicanos que poseen ese logro. El primero fue Julio Franco pegó 201 en 1991 con Texas. Franco estuvo en 146 juegos en la segunda. Luego Alfonso Soriano dio 209 hits con los Yankees en 2002. Accionó en 155 partidos en la segunda y en uno como designado. Plácido Polanco despachó 200 incogibles con los Tigres de Detroit en la contienda de 2007. Estuvo en 141 choques en el segundo saco y en uno como designado. Pero repetir esa meta no es una empresa sencilla. De 12 dominicanos que han pegado la respetada cantidad de inatrapables en una campaña, cinco registran dos. El Club RD 200, inaugurado por Felipe Rojas Alou en 1966 con 218 cohetazos, tiene a Vladimir Guerrero como el más destacado con cuatro estaciones logrando el objetivo. Recta dura. La proyección de Canó no es bondadosa ni mucho menos.
Sin la jornada de anoche, tiene 156 hits, lo que da un cálculo de 199 para el final de la campaña, según Espn. Ese número puede variar en cualquier momento. Todo depende de cuán caliente termine. El hijo de José Canó ha participado en 126 juegos, es decir, en cada uno de los partidos de los Yankees hasta el momento, por lo tanto al equipo le restan 36 encuentros de vuelta regular. Está claro que necesita de muchas jornadas de varios batazos por terreno de nadie.
Pero dudar que Canó (.323 de promedio con 25 cuadrangulares y 87 remolcadas) pueda hacerlo, es negarle el respeto que se ha ganado en base a palos con los Yankees.
Robinson es uno de cuatro dominicanos que poseen ese logro. El primero fue Julio Franco pegó 201 en 1991 con Texas. Franco estuvo en 146 juegos en la segunda. Luego Alfonso Soriano dio 209 hits con los Yankees en 2002. Accionó en 155 partidos en la segunda y en uno como designado. Plácido Polanco despachó 200 incogibles con los Tigres de Detroit en la contienda de 2007. Estuvo en 141 choques en el segundo saco y en uno como designado. Pero repetir esa meta no es una empresa sencilla. De 12 dominicanos que han pegado la respetada cantidad de inatrapables en una campaña, cinco registran dos. El Club RD 200, inaugurado por Felipe Rojas Alou en 1966 con 218 cohetazos, tiene a Vladimir Guerrero como el más destacado con cuatro estaciones logrando el objetivo. Recta dura. La proyección de Canó no es bondadosa ni mucho menos.
Sin la jornada de anoche, tiene 156 hits, lo que da un cálculo de 199 para el final de la campaña, según Espn. Ese número puede variar en cualquier momento. Todo depende de cuán caliente termine. El hijo de José Canó ha participado en 126 juegos, es decir, en cada uno de los partidos de los Yankees hasta el momento, por lo tanto al equipo le restan 36 encuentros de vuelta regular. Está claro que necesita de muchas jornadas de varios batazos por terreno de nadie.
Pero dudar que Canó (.323 de promedio con 25 cuadrangulares y 87 remolcadas) pueda hacerlo, es negarle el respeto que se ha ganado en base a palos con los Yankees.
EL CARIBE
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