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CHICAGO Ahora que los Cachorros han tomado medidas para rejuvenecer al equipo, el antesalista dominicano Aramis Ramírez está ponderando dónde quiere jugar la próxima temporada. Ramírez puede ejercer una opción de su contrato para la próxima campaña valorada en US$14.6 millones. "Pienso cumplir con mi contrato", dijo Ramírez. "Firmé aquí y por menos dinero para quedarme. No me quiero ir a ningún lado". Agregó, "Pero al mismo tiempo, quiero ganar. Tengo 32 años. No soy (el también dominicano Starlin) Castro. Él tiene mucho tiempo por delante. Ya veremos. Ya veremos qué pasa".
Este ha sido un año fuera de lo normal para Ramírez, quien está bateando .227 con 17 jonrones y 56 impulsadas, mientras ha tenido que lidiar con una lesión en el pulgar izquierdo. Ramírez ahora es el bateador más peligroso en el lineup de los Cachorros, tras la partida de Derrek Lee, quien fue canjeado a los Bravos. "Es triste que se vaya alguien así, no sólo por la clase de jugador que es, sino por la clase de persona", dijo Ramírez. "Hemos sido compañeros durante siete años. Él tiene que seguir adelante y nosotros tenemos que seguir adelante". Los Cachorros actualmente tienen diez novatos en su roster de 25 jugadores. ¿Cuánto tiempo tardarán en enderezar la nave? "Habría que preguntarle (al gerente general) Jim Hendry", dijo Ramírez. "Yo sólo juego en la tercera. No sé qué intenciones tienen los dueños. Desconozco sus planes. No sé si quieren irse con jugadores jóvenes o si van a buscar veteranos. Ellos saben en qué dirección quieren ir".
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