La parte frontal de la Range Rover de Francisco Cordero está adornada con siete letras separadas que forman el nombre de Martina. Es su madre fallecida, la mujer en la que encontró una enorme motivación el año pasado. Luego de su deceso a principios de octubre de 2008, Cordero pasó por el quirófano un mes después. Sentía que todo se venía abajo. Sin duda un mal augurio para la temporada siguiente, 2009. Pero él encontró una fuerza espiritual en ese capítulo doloroso. Su madre nunca se fue y siempre estuvo ahí, en cada lanzamiento, en cada partido salvado.
Esa vez rescató 39 juegos con los Rojos de Cincinnati, siempre con la mujer que le dio la vida en mente. “Fue mi madre, mi novia, mi esposa y mi confidente”, afirma. “Es la mujer que nunca olvidaré”. Es 2010. Cordero se marcha hoy a Arizona con la misma motivación, las iniciales de su madre en su guante es una señal de que jamás la olvidará.
Eso, sin dudas, es más fuerte que su potente recta y que su slider. Es su mayor alma en el terreno de juego.
“El 2009 fue una temporada ejemplo para mí”, narró, mientras hacía maletas para emprender su viaje. “Con todas esas cosas malas que me pasaron me pude recuperar, creo que este año todo va a ser mejor que el pasado”. Francisco piensa que ahora hay un panorama distinto. El tierno recuerdo de su progenitora se mantiene, pero ahora está totalmente sano. “Esta vez no tengo quejas en cuanto a mi salud gracias a Dios, mi brazo está bien y mi pie también”, dice. “Jugué pelota de invierno y puse a prueba mi físico, a estas alturas lo normal era que solo estuviese entrenando, pero ahora no solo entrené, sino que jugué, estoy en forma, así que espero cosas buenas porque voy a llegar ready”.
El derecho dice que su actual condición le permitirá ayudar a unos Rojos que en la temporada muerta hicieron poco para competir. Él no piensa así, cree que con la adicción de Orlando Cabrera, Cincinnati tendrá un cuadro envidable, pero espera que la salud acompañe al equipo.
Esa vez rescató 39 juegos con los Rojos de Cincinnati, siempre con la mujer que le dio la vida en mente. “Fue mi madre, mi novia, mi esposa y mi confidente”, afirma. “Es la mujer que nunca olvidaré”. Es 2010. Cordero se marcha hoy a Arizona con la misma motivación, las iniciales de su madre en su guante es una señal de que jamás la olvidará.
Eso, sin dudas, es más fuerte que su potente recta y que su slider. Es su mayor alma en el terreno de juego.
“El 2009 fue una temporada ejemplo para mí”, narró, mientras hacía maletas para emprender su viaje. “Con todas esas cosas malas que me pasaron me pude recuperar, creo que este año todo va a ser mejor que el pasado”. Francisco piensa que ahora hay un panorama distinto. El tierno recuerdo de su progenitora se mantiene, pero ahora está totalmente sano. “Esta vez no tengo quejas en cuanto a mi salud gracias a Dios, mi brazo está bien y mi pie también”, dice. “Jugué pelota de invierno y puse a prueba mi físico, a estas alturas lo normal era que solo estuviese entrenando, pero ahora no solo entrené, sino que jugué, estoy en forma, así que espero cosas buenas porque voy a llegar ready”.
El derecho dice que su actual condición le permitirá ayudar a unos Rojos que en la temporada muerta hicieron poco para competir. Él no piensa así, cree que con la adicción de Orlando Cabrera, Cincinnati tendrá un cuadro envidable, pero espera que la salud acompañe al equipo.
Opiniones sobre dos compañeros
Juan Francisco
Infield-outfield
“Ellos tienen a Francisco en mente porque lo mandaron a jugar en los jardines. Él ha hecho lo necesario para quedarse, que es hacer un buen desarrollo en las ligas menores. Se tomó su cafecito en Grandes Ligas y demostró lo que tiene”.
Infield-outfield
“Ellos tienen a Francisco en mente porque lo mandaron a jugar en los jardines. Él ha hecho lo necesario para quedarse, que es hacer un buen desarrollo en las ligas menores. Se tomó su cafecito en Grandes Ligas y demostró lo que tiene”.
Johnny Cueto
Lanzador
“El ha demostrado todo hasta el momento. El año pasado se cansó un poco y bajó al final, pero todos vieron que tuvo buenos números en los tres primeros meses. Cueto tiene un mundo en la bola, es cuestión de madurar un poquito”.
Lanzador
“El ha demostrado todo hasta el momento. El año pasado se cansó un poco y bajó al final, pero todos vieron que tuvo buenos números en los tres primeros meses. Cueto tiene un mundo en la bola, es cuestión de madurar un poquito”.
ELCARIBE.COM.DO
No hay comentarios:
Publicar un comentario