José Reyes necesita regresar a la élite de torpederos de la Liga Nacional y del béisbol. Su ausencia durante toda la segunda mitad de la temporada pasada y sus problemas de salud han sacado al criollo del escenario. La pobre decisión de Jerry Manuel colocarlo de tercero al bate puso en evidencia a Reyes, quien no se buscó eso. Su promedio de .222, apenas con 22 anotadas y 12 remolcadas, nueve extrabases en 176 turnos son una muestra de que todavía no se ha recuperado para poner las cifras que logró entre 2005 y 2008.
Eso ha dejado a su compatriota Hanley Ramíez en solitario y sólo rivalizando con el archiveterano y futuro inmortal Derek Jeter como los grandes torpederos de este momento en las mayores, pues Jimmy Rollins, un JMV como Miguel Tejada y Alex Rodríguez, está en un año para olvidar por lesiones que le molestaron y siguen molestando. Así que este año para el Juego de Estrellas, Ramírez, el premier del grupo, probablemente estará acompañado de Troy Tulowitzki y Stephen Drew porque tanto Rollins como Reyes, éste por segundo año seguido; no formarán parte del Gran Trío (Big Three) de torpederos de la Liga Naciona.
EL NACIONAL / ROLANDO GUANTE
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