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Albert Pujols se ha abrazado con el gerente de los Cachorros Jim Hendry, tenido problemas gracias a su mala racha, jugado la antesala, y ahora aterrizado en la lista de lesionados por problemas en su hombro y muñeca. Por lo menos ha sido una temporada llena de aventuras. Antes de la lesion del domingo, Pujols había jugado en cada partido de su equipo, bateando para promedio de .279 con 17 jonrones, 45 carreras remolcadas y 52 anotadas totales que lo ponían en ritmo de conseguir 38 jonrones, 100 remolcadas y 115 anotadas. Números grandiosos para los meros mortals, pero no para lo que se espera de La Máquina. Su promedio es 52 puntos menor al promedio de su carrera al entrar a la temporada 2011, su porcentaje de embase de .355 es 71 puntos menor y su slugging está 124 puntos por debajo. Ha conectado para 17 dobles matanzas, líder en esa categoría en la Liga Nacional.
Al llegar a la lista de lesionados, Pujols se une a David Freese and Allen Craig (además del lanzador Adam Wainwright). Matt Holliday se ha perdido 25 juegos. A pesar de esas lesiones, los Cardenales aún se encuentran segundos en la Liga Nacional en carreras anotadas, apenas a cuatro detrás de los Rojos. Considerando los efectos de los estadios, los Cardenales tienen la mejor ofensiva de la Liga Nacional (de hecho, tienen mejor porcentaje de embase y slugging que los Rojos). Aquí hay dos preguntas: (1) Al ser colocado en la lista de lesionados, ¿cuál es el daño para los Cardenales? (2) Asumiendo que hayan más repercusiones de la lesion, ¿debería Pujols jugar mejor en el resto de la temporada? La Pregunta No. 1 es fácil de responder.
La profundidad de los Cardenales ha sido clave para mantenerse en la lucha contra los Cerveceros por el control de la División Central de la Liga Nacional. Al perder a Pujols, es posible que muevan a Lance Berkman a la primera base y JonJay al jardín derecho. En su labor a tiempo parcial esta temporada, Jay ha logrado números de .313/.364/.436. Tony La Russa sigue viéndolo como un jugador sustituto, no le da muchas oportunidades contra los zurdos, así que podrían verlo compartir tiempo de juego con Adrian Brown in a platoon. Colby Rasmus también debe estar a punto de meterse en una buena racha; su OPS de .755 es 104 puntos menor al del año pasado. Y se supone que Freese comience una asignación de rehabilitación de su mano rota el martes, así que lo esperan de vuelta pronto.
Todo esto significa que los Cardenales podrían lograr sostenerse a pesar de la ausencia de Pujols. Además debemos señalar que los equipos de béisbol dependen menos de sus superestrellas que en otros deportes; esto es cierto a lo largo de la temporada, por lo que una estadía en la lista de lesionados es menos dañina de lo que se pienda. Cuando los Cardenales tengan a todo el mundo de vuelta, La Russa tendrá más flexibilidad y profundidad que cualquier otro manager en la Liga Nacional.
La Pregunta No. 2 es más difícil de contestar. La respuesta fácil es que Pujols ha estado bateando con mala suerte, con promedio de bateo de pelotas en juego de .247, muy lejos de su promedio del 2010 de .297 (y más lejos aún de su promedio de por vida de .312). Pero hay razones para esto: su proporción de roletas ha aumentado, su proporción de líneas ha disminuido un poco.
De forma extraña, el contacto no ha sido un problema: En realidad, se ha estado ponchando menos (y recibido menos bases por bolas) que su ritmo normal. Su proporción de ponches ha bajado casi un 4 por ciento con relación al año pasado, y su proporción de bases por bolas ha descendido un 4.5 por ciento. (Su proporción de boletos ha bajado principalmente por una gran baja en bases intencionales: 38 en 2010, apenas cuatro en el 2011. Gracias, Lance Berkman.) El asunto: Los Cardenales han logrado superar dificultades toda la temporada. Están empatados en la cima de su división. Yo veo esto como otro pequeño obstáculo que tendrán que superar.
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