PHOENIX Alex Rodríguez manifestó que no se considera un jonronero y que normalmente no se preocupa por volarse la cerca. Pero tras conectar el jonrón número 592 de su carrera contra los Diamondbacks, el antesalista de los Yankees quiso hablar acerca del tema. A-Rod remolcó tres carreras en la victoria de los Mulos y quizás haya salido de la mala recha por los jonrones en la que había caído tras ausentarse por una lesión en la cadera derecha. Aunque llegó a ese partido con cuatro impulsadas, un jonrón y promedio de .220 en el mes de junio, dice que no estaba preocupado.
"No, nunca", dijo Rodríguez, quien lleva nueve jonrones y 48 impulsadas en lo que va de la temporada. "Conecto muchos cuadrangulares. Me preocupo si no estoy haciendo buen contacto porque significa que no estoy empujando carreras. Me preocupo por las carreras impulsadas y por las victorias. Por algún motivo, nunca me he considerado un bateador de jonrones". Para alguien cuya autoimagen no es la de un toletero, Rodríguez está muy cerca de formar parte de un grupo exclusivo. Necesita solamente ocho jonrones más para convertirse en el séptimo jugador en la historia de Grandes Ligas que llega a 600 cuadrangulares de por vida. Una vez que lo logre, ingresará a un club al cual pertenecen Barry Bonds, Hank Aaron, Babe Ruth, Willie Mays, Ken Griffey Jr. y el dominicano Sammy Sosa. Tras el retiro de Griffey, A-Rod encabeza a los jugadores activos en vuelacercas.
El bambinazo de Rodríguez en Arizona fue solamente su cuarto desde el 19 de mayo. Pero si le mortifica la lentitud de su progreso hacia la cifra redonda, no lo está demostrando. "Estoy enfocado en las victorias y en ayudar al equipo a ganar", dijo Rodríguez. "Pero me estoy acercando". A-Rod comenzó a dar señales de vida con el madero en la derrota de los Yankees por 4-10 en el primer partido en Arizona, ya que dio dos batazos al jardín central-derecho. "El poder es algo que va y viene. Puedes dar cinco o seis jonrones en una semana", dijo Rodríguez al preguntársele sobre la disminución de su poder. "No me preocupo por conectar cuadrangulares. Estoy seguro de que cuando termine la campaña tendré la misma cantidad que tengo todos los años. Lo que me preocupa es llevar la bola lejos y hacer buen contacto en cada turno al bate".
Rodríguez no ha terminado una temporada con menos de 30 vuelacercas y 100 carreras empujadas desde 1997 cuando jugaba por los Marineros de Seattle. El año pasado alcanzó ambas cifras tras ser operado de la misma cadera que le ha dado problemas últimamente y perderse los primeros 28 juegos de la campaña. Este año, Rodríguez se perdió sólo cinco juegos por la lesión, pero ha promediado un jonrón cada 31 turnos. A-Rod, quien conectó 57 jonrones en el 2002, es el único jugador en la historia de Grandes Ligas que ha dado 30 cuadrangulares e impulsado 100 carreras en 13 temporadas. A pesar de la buena noche que tuvo al bate contra Arizona en el segundo juego, Rodríguez no quiso afirmar que ya se sienta al 100 por ciento.
"Diría que he ido mejorando todos los días en los últimos cuatro o cinco días", dijo Rodríguez. "No estoy completamente recuperado. Tengo que seguir trabajando fuerte, hacer mis ejercicios en la piscina y venir y ver (al entrenador). Todos los días estoy mejorando".
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