HOUSTON
Si hay algo que mantiene sorprendidos a muchos de los aficionados de los Astros de Houston es el desempeño del abridor Wandy Rodríguez. El lanzador dominicano, quien estelarizara una campaña fenomenal en el 2009 con efectividad de 3.02, novena mejor rendimiento en la Liga Nacional y 193 ponches que lo dejaron como octavo en ese apartado, no parece ni la sombra de lo que ayer fue. ¿Será ese mismo pitcher que los fanáticos aprendieron a querer y valorar desde que aterrizara en la "Ciudad Espacial" en aquel inolvidable 2005, cuando la novena local jugó su única Serie Mundial en la que Wandy tomó también acción?
Es un Rodríguez irreconocible que ha batallado gran parte de la temporada para alcanzar el nivel de antes que lo llevó a consolidarse como el segundo mejor lanzador del club y futuro sucesor del as Roy Oswalt.
En 12 aperturas este año, el quisqueyano lleva marca de 3-8 y promedio de carreras limpias de 4.95. El caribeño no se esconde de las críticas ni se tapa en las excusas. Por el contrario, reconoce sus debilidades y su real estado de rendimiento.
Acepta faltas
Tan valiente como es para pararse en el montículo y como una fiera enfrentarse a los adversarios, así mismo se viste de valentía para aceptar que no está tirando como espera, pero al mismo tiempo trabaja duro para encontrar ese punto ideal que se le exige. "Me siento bien físicamente; los problemas del comienzo de temporada ya no están. Me siento mejor en cada salida que lanzo. Estoy trabajando con lo que quiero y veo que estoy sacando buen resultado", aclaró para despejar las dudas de aquellos que piensan que su baja de juego está relacionada con una vieja lesión en la espalda. Lo bueno es que siempre hay luz detrás de las nubes negras y Wandy siente que ya la está comenzando a ver. Las buenas señas que mostró en su último partido lo animan tanto a él como a su manager Brad Mills, quien lo reconfirmó este año reconociéndole su jerarquía como el segundo en la rotación.
Tan valiente como es para pararse en el montículo y como una fiera enfrentarse a los adversarios, así mismo se viste de valentía para aceptar que no está tirando como espera, pero al mismo tiempo trabaja duro para encontrar ese punto ideal que se le exige. "Me siento bien físicamente; los problemas del comienzo de temporada ya no están. Me siento mejor en cada salida que lanzo. Estoy trabajando con lo que quiero y veo que estoy sacando buen resultado", aclaró para despejar las dudas de aquellos que piensan que su baja de juego está relacionada con una vieja lesión en la espalda. Lo bueno es que siempre hay luz detrás de las nubes negras y Wandy siente que ya la está comenzando a ver. Las buenas señas que mostró en su último partido lo animan tanto a él como a su manager Brad Mills, quien lo reconfirmó este año reconociéndole su jerarquía como el segundo en la rotación.
"Estuvo mucho mejor en su última salida. La manera en que se enfrentó a sus rivales y los retó, creo que es un gran paso en la dirección correcta. Lo que esperamos es que siga teniendo esos progresos en la vía correcta", comentó el piloto.
Muestra mejoría
Fue en ese juego ante Colorado el pasado lunes que el natal de Santiago supo escapar de problemas con la casa llena en la quinta entrada, aunque perdió al permitir tres vueltas en siete entradas. Y en su apertura anterior, le ganó a Washington para adjudicarse su primer triunfo desde el 12 de mayo. Ponchó a ocho rivales -una marca personal en la temporada- en poco más de cinco episodios. Aunque el zurdo del Cibao lanzó mejor ante Washington y Colorado, está muy lejos de ser el pitcher dominante del año pasado. Mientras la edición pasada ponchó a 193 en 205 innings, su ritmo esta campaña está muy lejos de llegar a esa cifra al llevar sólo 26 ponchados, un asombroso bajón. Lo malo es que está permitiendo muchos hits y su bola rápida y curva peligrosa no han sido efectivas. Todos los progresos obtenidos en las dos últimas temporadas prácticamente no se han visto
Fue en ese juego ante Colorado el pasado lunes que el natal de Santiago supo escapar de problemas con la casa llena en la quinta entrada, aunque perdió al permitir tres vueltas en siete entradas. Y en su apertura anterior, le ganó a Washington para adjudicarse su primer triunfo desde el 12 de mayo. Ponchó a ocho rivales -una marca personal en la temporada- en poco más de cinco episodios. Aunque el zurdo del Cibao lanzó mejor ante Washington y Colorado, está muy lejos de ser el pitcher dominante del año pasado. Mientras la edición pasada ponchó a 193 en 205 innings, su ritmo esta campaña está muy lejos de llegar a esa cifra al llevar sólo 26 ponchados, un asombroso bajón. Lo malo es que está permitiendo muchos hits y su bola rápida y curva peligrosa no han sido efectivas. Todos los progresos obtenidos en las dos últimas temporadas prácticamente no se han visto
Sin embargo, hay que tener paciencia con él, porque está mostrando signos de mejoría. A su favor tiene el no haber permitido muchos jonrones y tener el mejor porcentaje de carreras en 150 pitcheos. Wandy no estará pitchando tan bien como muchos quisieran, pero una cosa sí es cierta: ha dado un gran paso en reconocer el problema y de esa manera está más cerca de solucionarlo.
¿Sientes que estos últimos juegos son el comienzo de algo mejor?
Gracias a Dios me he sentido mucho mejor hasta ahora. Cada vez que salgo a lanzar trato de sacar lo mejor de mí. El juego del lunes lo lancé muy bien, gracias a Dios. Lo único malo que vi fue que lancé mucho pitcheo. Tengo que tratar de lanzar menos para ir más lejos. Nada más tiré cinco innings y quisiera tirar hasta ocho o nueve. La razón que no llegué muy lejos fue eso porque tiré 116 pitcheos en cinco entradas. Lo que quiero es tratar de ir lo más lejos que puedo en el juego.
Gracias a Dios me he sentido mucho mejor hasta ahora. Cada vez que salgo a lanzar trato de sacar lo mejor de mí. El juego del lunes lo lancé muy bien, gracias a Dios. Lo único malo que vi fue que lancé mucho pitcheo. Tengo que tratar de lanzar menos para ir más lejos. Nada más tiré cinco innings y quisiera tirar hasta ocho o nueve. La razón que no llegué muy lejos fue eso porque tiré 116 pitcheos en cinco entradas. Lo que quiero es tratar de ir lo más lejos que puedo en el juego.
¿Cuál es el balance en el análisis de tu rendimiento hasta ahora?
He estado trabajando mucho con mi "breaking ball" (lanzamiento rompiente), en eso no he estado muy bien este año. En la última salida que tuve, sí la estuve lanzando mejor. Estoy trabajando bastante en el "bullpen" con eso, en lo que estoy haciendo mal, porque no está donde debe estar y he visto muchos videos también. O sea estoy encima de eso, trabajando para poner bien lo que tengo que poner bien.
He estado trabajando mucho con mi "breaking ball" (lanzamiento rompiente), en eso no he estado muy bien este año. En la última salida que tuve, sí la estuve lanzando mejor. Estoy trabajando bastante en el "bullpen" con eso, en lo que estoy haciendo mal, porque no está donde debe estar y he visto muchos videos también. O sea estoy encima de eso, trabajando para poner bien lo que tengo que poner bien.
¿Cómo se siente el ambiente con la inminente salida de Roy Oswalt?
El como quien dice, es el que nos abre la puerta porque es el primer pitcher. Nos sentimos muy mal porque es un tremendo pitcher pichando y profesionalmente. Es un buen muchacho, serio. Si uno necesita algo de él, cualquier pregunta acerca de un bateador, él le ayuda a uno. Es un buen compañero y lo vamos a extrañar mucho si se nos va.
El como quien dice, es el que nos abre la puerta porque es el primer pitcher. Nos sentimos muy mal porque es un tremendo pitcher pichando y profesionalmente. Es un buen muchacho, serio. Si uno necesita algo de él, cualquier pregunta acerca de un bateador, él le ayuda a uno. Es un buen compañero y lo vamos a extrañar mucho si se nos va.
¿Te ha costado mucho lidiar con la baja de juego?
Sí, he estado batallando con esta situación. Todavía no me siento como yo lanzo. La última salida fue que sentí que estaba tirando mi "breaking ball" como en la temporada pasada. La verdad fue la primera vez que me sentí bien con lo que es mi picheo. En todas las otras nada más pensaba en por qué no estaba tirando igual, viendo videos, estaba encima de eso, y ya me sentí bien cómodo y mi brazo lo sentí más fuerte. Ahora, a seguir trabajando.
Sí, he estado batallando con esta situación. Todavía no me siento como yo lanzo. La última salida fue que sentí que estaba tirando mi "breaking ball" como en la temporada pasada. La verdad fue la primera vez que me sentí bien con lo que es mi picheo. En todas las otras nada más pensaba en por qué no estaba tirando igual, viendo videos, estaba encima de eso, y ya me sentí bien cómodo y mi brazo lo sentí más fuerte. Ahora, a seguir trabajando.
No pienso en nada de eso. Los jefes son lo que saben qué hacer con uno. Lo mío es hacer mi trabajo cuando salgo a lanzar. No soy yo el que toma esa decisión.
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