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Los Medias Rojas de Boston se tragaron $10 millones para desharecerse de Manny Ramírez justo antes de la fecha límite de cambios en el 2008, y dos años más tarde, los Dodgers dejaron libre a Ramírez luego de recibir 170 juegos, 27 jonrones y una suspensión por dopaje en recompensa por los $33 millones que gastaron en el jardinero en el 2009 yd 2010.
Él se quitó de esos dos equipos. Los Dodgers no han dicho nada en forma pública debido al decoro profesional, pero detrás de esa fachada hay opiniones muy fuertes y enojadas acerca de la manera en que Ramírez se comportó en su última temporada con el equipo sentimientos que se asemejan a los que sintieron sus compañeros y jefes en Boston hace dos años. Pero Ramírez, a sus 38 años, todavía puede batear y debería ayudar a los Medias Blancas en los últimos 33 días de la temporada, y va a recibir ofertas de empleo en el próximo invierno. Sin embargo, cualquier gerente general que le ofrezca un acuerdo de mucho dinero debería ser evaluado mentalmente, dada la cantidad de dinero desperdiciada en los últimos tres años sencillamente porque Ramírez decidió que no quería jugar más.
Si un equipo quiere firmar a Manny para el 2011, esto es lo que hace sentido: Ellos deberían ofrecerle un salario base bajo -- $800,000 a $1 millón y estructurar el resto del acuerdo en una manera que lo impulse a mantenerse activo en el terreno. Incentivos por apariciones en el plato. En otras palabras: Tendrá que jugar para que se le pague. Digamos, en aras del argumento, que los Medias Blancas quieran que Manny vuelva con ellos en el 2011, y le dan un acuerdo de $5 millones. Bueno, la historia nos dice que hay buena oportunidad que él decida que no quiere jugar, a pesar del dinero que se le está pagando. Aparentemente a él le falta un nivel básico de integridad profesional que cientos de miles de millones de personas tienen en sus trabajos. Los compradores que se preparen.
Estoy seguro que los Medias Blancas estaban encantados con el hecho que Manny parecía estar demasiado fatigado para jugar el martes, como lo describe David Haugh en su escrito sobre la bizarra conferencia de prensa de 15 minutos que celebró. No está claro si piensa cumplir las reglas de cabello del equipo, según escribe Mark Gonzales. Los Medias Blancas le están dando un poco de espacio a Manny, según escribe Joe Cowley. Ellos están gastando $3.8 millones, o un poco más de $100,000 al día, y en el primer día, ellos no recibieron casi nada por su dinero a pesar que su presencia en el círculo de espera quizás pudo haber influído en la selección de pitcheo de un lanzador derecho de los Indios en la novena entrada.
Los momentos más interesantes de Ramírez con los Medias Blancas solo sucederán si Chicago se sale de la contienda en las próximas dos semanas. Si eso sucede, y Ramírez se quita de los Medias Blancas como hizo con los Medias Rojas y los Dodgers, entonces Ozzie Guillén quien nunca ha tenido un filtro como lo tienen Terry Francona y Joe Torre do lo criticará públicamente. Francona y Torre nunca hicieron eso ya fuera porque querían mantener su valor de cambio o porque estaban preocupados porque Ramírez se encerrara en su propio mundo, o porque simplemente son corteses. A Ozzie no le va a importar nada de eso; él dirá lo que piensa. Pero si los Medias Blancas ganan y Manny batea, bueno, entonces todo estará bien. Hasta que Ramírez descubra en el invierno cuan pocas ofertas de empleo tenga.
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