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Ubaldo Jiménez no se molesta fácilmente, pero la idea de que los Rockies estarían motivados a cambiarlo debido a su actitud provocó su alteración este viernes. El New York Post, citando una persona familiar con el pensamiento de los Rockies, dijo que el equipo cree que él ha estado disgustado por no recibir una extensión contractual como Troy Tulowitzki y Carlos González. “Eso es una locura. ¿Por qué yo lastimaría mi equipo? Yo he dicho a ustedes antes que no estaba molesto con eso para nada”, dijo Jiménez. “Yo no lancé bien al comienzo por la lesión en mi pulgar y la ingle (flexor de la cadera). No pude fortalecer mi brazo en la primavera. No tenía mi velocidad o la bola rompiente. Es por eso que tuve problemas. Ahora mismo, siento que puedo dominar de nuevo”.
Con más de una década en su trabajo, el gerente general Dan O’Dowd comprende que los conversaciones de cambio en esta época del año. Pero él con vehemencia negó algún problema con el carácter de Jiménez. “Yo no sé de donde está viniendo eso y no está ni cerca de la verdad”, dijo O’Dowd. “El es tan buen muchacho como el mejor que pueda cruzar en este juego”. La realidad es esta: Los Rockies van a oir si los equipos llaman preguntando por Jiménez porque ellos están a 8 juegos y medio detrás en la división y el mercado de lanzadores abridores permanece estrecho. Si equipos como los Yankees, Tigres, Rojos y Vigilantes –para mencionar unos cuantos- quieren abrumar a los Rockies –un mínimo de tres jugadores es necesario, incluyendo pitcheo- Colorado escuchará. Un cambio es una posibilidad lejana, porque los Rockies no tiene nada que hacer con el lanzador de 27 años, que está bajo contrato por tres años más a un razonable precio total de $17.95 millones.
“Yo oigo todos los comentarios acerca de cambios debido a los mensajes de texto y mensajes en mi página de Facebook. El béisbol es un negocio”, dijo Jiménez. “No quiero ir a ningún lado. Adoro Colorado. Pero también sé que si un equipo puede hacer algo para mejorar, ellos podrían hacerlo. En este juego usted nunca puede decir nunca. Sin embargo, quiero estar aquí”.
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