Confesiones de un futuro beisbolista profesional.
Luis Carlos Hidalgo firmado por los Tigres de Detroit en la Dominican summer league (Liga Dominicana de Verano) nacido en Fantino, Cotui, ha sido un joven dedicado a la pelota desde su niñez, sus padres siempre lo apoyaron para que fuera un gran pelotero profesional, solidario y compañero; desde pequeño la Vitilla y la “plaquita” fueron sus juegos favoritos en el barrio, aunque también era bastante fanático “jugando pelota con un caco de muñeca”.
Luis Carlos nos habla un poco sobre la Vitilla, ya que ha tenido bastante experiencia en el juego:
El juego de la Vitilla, siempre ha sido un juego de entretenimiento, que nos ha ayudado a desarrollar habilidades en el bateo, aunque soy pitcher (Lanzador) siempre jugaba en el barrio, esta me daba la facilidad de conocer más la pelota y poder batear mejor. Aunque siempre mis amigos y yo teníamos problemas en la casa, porque cada vez que se nos rompía el palo de la escoba de mi madre, teníamos que quedarnos sin decir nada, por el tremendo lio que se podía armar, “solo por un palo de escoba”, al igual que las Vitillas, siempre la cogíamos de los botellones de agua.
Lanzar una Vitilla
Es una de las cosas más difíciles que se puede hacer, la vitilla es difícil de agarrar por ser fina, por eso casi nunca se puede sujetar de la manera correcta, hay que sujetarla de la forma más plana posible para que vaya directamente, (le pase derecho por el bate).
Batear una Vitilla
Todo depende de la visión, y de cómo sujetas el Bate, (palo de escoba), la tapa de bateo al ser un objeto muy fino se necesita tener una buena vista, así igual que sujetar el Bate duro y correctamente, todo depende de la habilidad que tengas y la experiencia en el juego.
Hambre en su pasión
Desde pequeño me dirigía al play, a la Escuela de Beisbol Divino Niño a jugar pelota con mis compañeros, casi siempre me iba sin desayunar porque solo lo hacía por pasión y por deseo, mis padres siempre trataron de darme desayuno y cena, pero por mi desesperación para que me entraran a pichar en uno de los equipos de la escuela, me iba corriendo, se me olvidaba to, solo quería “ponchar” a to el que se me parara al frente con un bate, Gracias a Dios nunca llegué a desmayarme por comida ni nada, pero pasé mucha hambre solo por mi deseo de ser un gran pelotero.
Deseo de superación
Siempre veía esos grandes peloteros en las grandes ligas, soñaba todas las noches con estar en el estadio Cibao, pichando; mirando como esas personas ayudaban muchos niños y gente pobre, me encantaba ayudar muchos niños, por eso quiero ser una estrella del beisbol, quiero “ponchar” hasta el más duro de la pelota, no quiero que nadie me le dé un hits, siempre he soñado con ser un gran beisbolista y todo con deseo y dedicación se puede, cual estoy mostrando para ser alguien y ayudar mi familia.
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